Esta mañana, 16 de julio de 2023, se ha vuelto a celebrar la carrera IV Sendas de Cid en Jadraque del Circuito MTB provincial de Guadalajara. Tenía varias incertidumbres, porque en el ultimo año me he distraído excesivamente tratando de digerir una serie de circunstancias que ha encadenado una mala racha. Y no he sabido gestionar el tiempo adecuado para dedicarle al entreno, aunque eso no me ha evitado disfrutar de mi afición, además de la constancia de muchos años de entreno acumulados he forjado una base sólida que es la mejor terapia para combatir las malas rachas.
No compito para competir,
compito para explorar y divertirme con los de mi especie.
Creo que sufro la enfermedad que algunos llaman mapamunditis porque, después de 10 años haciendo rutas y retos, llevo 6 años practicando cicloturismo de largo recorrido porque mi zona de confort se me queda pequeña y me aburro de ver siempre lo mismo, aunque tengo la suerte de vivir en una zona que siempre hay algo nuevo que descubrir o reinventar, y sino se reinventa igual. Todos tenemos épocas y fases para todo, aparte de las consecuencias cotidianas que puedan surgir, no dejan de ser distracciones o maestros emocionales con que lidiar. No obstante, bajar la guardia es algo normal porque no podemos estar al ciento por ciento siempre, lo importante es detectar cuando bajamos esa guardia para reactivarnos de nuevo, de menos a más, es cuestión de entrenamiento y cierta constancia.
Quizá pueda sonar a tópico si digo que, no es algo sencillo pero merece la pena, pero es cierto. El verdadero tópico es estigmatizar los estímulos que necesita nuestro cuerpo y mente, para justificar la guardia baja por el motivo que sea. Quizá no podamos reactivarnos tan deprisa como nos gustaría, porque dependamos de circunstancias ajenas que nos limiten como la economía, la salud, relaciones, trabajo, otras prioridades, la edad, etc. Pero mientras hay vida, hay esperanza y hay que activarse en la medida de cada uno, hasta recuperar nuestro estado optimo de acuerdo con las circunstancias o nuestros objetivos, paso a paso se hace más camino que quedarse quieto parado.
Las creencias irracionales juzgan que el deporte a corto plazo es malo,
pues bien, opino que no hacerlo a largo plazo es mucho peor.
Lo importante no es ganar medallas, lo importante es salir, porque sino sales ya has perdido. Porque cuando sales ya has ganado, y además tienes la opción de seguir ganando, en función de los objetivos que te marqués.
Las competiciones no dejan de ser un CV más, para ponerse a prueba, marcarse objetivos y, al fin al cabo, ganar reconocimiento, para bien o para mal. Pero la auténtica aventura empieza cuando compites contigo mismo, porque es donde reconoces tus límites, sea en una competición o yendo por libre.
Sobretodo para divertirte haciendo lo que te gusta, sufriendo, sudando, arriesgando, explorando. Porque después de la tormenta, llega la calma, el relax y la satisfacción, mucho más que si te quedas sentado viendo cómo otros pasan a la acción.
Hay dos clases de personas;
los que viven de recuerdos o sueños
y los que pasan a la acción construyendo más sueños y recuerdos.
Y luego están lo que viven una sola aventura y se creen más sabios que los que han vivido 1000 aventuras. A ver, ambos no tienen el remedio definitivo, pero la experiencia es un plus para detectar las intenciones reales.
No sé cuando volveré a competir en carreras normales, en las de Jadraque seguro, para apoyar a mi pueblo, aunque ya podrían variar un poco el recorrido, que además fomenta el (ciclo)turismo rural. Lo que si estoy seguro, es que se me ha despertado la motivación exploradora para otro tipo de carreras no tan competitivas y de ultradistancia, incluso con perro, para que Neo también disfrute. 🐾💛
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