El verdadero propósito de viajar no tiene nada que ver con el dinero, ni con la comodidad. Sino con la curiosidad de salir fuera de la zona de confort para dejarse sorprender por las maravillas del mundo, incluso a la vuelta de la esquina.
El verdadero propósito de viajar no tiene nada que ver con el dinero, ni con la comodidad. Sino con la curiosidad de salir fuera de la zona de confort para dejarse sorprender por las maravillas del mundo, incluso a la vuelta de la esquina.
Como cualquier lenguaje de comunicación, las redes es el vehículo transmisor para ser usadas para bien o para mal.
La verdadera clave del éxito es hacer lo que te dé la gana, mientras no se cometa perjuicio ajeno, ni se haga caso de los opinólogos que no verifican sus fuentes.