En pleno siglo XXI, no se si por falta de ideas o por repetición de las mismas historias, ha resurgido una nueva serie televisiva basada en una antigua película cinematográfica de los noventa; Karate Kid Vs Cobra Kai.

Lo que demuestra que las primeras partes y las penurias de los inicios, son más honestos que las repeticiones y que, al margen del progreso, todas las generaciones guardan las mismas fases de conducta, especialmente cuando están sesgadas o estigmatizadas por las creencias irracionales, aunque merece la pena desgranarlas para analizar los segundos tropiezos.

Karate Kid es una saga de películas donde destaca las confrontaciones por intereses sociales y la superación personal de los inadaptados migratorios, con la temática de las artes marciales y el karate concretamente, una disciplina que hizo ponerse de moda en los años 80 y 90.

Las tres primeras películas lo marcaron la tendencia patriarcal con el protagonismo de Pat Morita, Ralph Macchio y, sobretodo, John Kreese el fundador de Cobra Kai.

La cuarta película entró en juego como protagonista el empoderamiento femenino de la mano de Hilary Swank. Fue la película más cuestionada por los propios actores del reparto original, que se quejaban que fue muy repetitiva y chapucera. En mi opinión, creo que, más bien demuestra la reticencia a la evolución de las circunstancias.

La quinta entrega con los nuevos tiempos del siglo XXI, hizo un remake de la primera entrega actualizada, relevando a los protagonistas iniciales con un veterano Jackie Chan y un nuevo aprendiz Jaden Smith, manteniendo la misma filosofía y argumentos de la trama inicial.

En 2018 llegó la docu serie a NetFlix de Cobra Kai, evangelizando de algún modo las entrañas del lado oscuro del Karate y sacando a relucir el protagonismo narcisista de los villanos. Dando a entender que ni los buenos son tan buenos, ni los malos tan malos o dando explicaciones de por qué son tan malos. Y es que en el fondo las personas no son tan diferentes ni tan iguales como parecen, nacen puras y se enturbian con la influencia de los intereses que marcan la respectiva experiencia de los años.

Por último en 2025 se estrena la película de Karate Legends juntando un reparto estelar con Ralph Macchio y Jackie Chan, tras el resurgimiento de la saga, ambos actores en Karate Kid 2010 y Cobra Kai 2018, respectivamente.

Encuentro que está bien rememorar la nostálgia de los buenos argumentos cinéfilos aunque, cuando se mezcla el interés financiero y competitivo de la taquilla, se corre el riesgo de explotar y quemar demasiado los buenos argumentos. Haciendo que la realidad supere la propia ficción del argumento.

Mi reflexión o conclusión final sobre la saga en sí, de Karate Kid y Cobra Kai, es que hay historias que se repiten porque son atemporales a todas las generaciones. Al margen de los avances y estilos de cada época respectiva, hay conductas cognitivas que al margen de las diferencias se repiten por instinto de supervivencia a ritmos diferentes según la experiencia individualizada de cada individuo o colectivo.

Es por eso que, el equilibro entre el aislamiento o ceder a lo innecesario para evitar los problemas como el Miyagui Do y la confrontación agresiva de Cobra Kai para hacerse respetar, está en el contacto cero hasta que todo caiga por su propio peso sin salpicar.

Aunque un aislamiento prolongado te vuelve débil y defenderse en exceso te vuelve arrogante, ya que los extremos no son para nada sanos, porque demasiado aislamiento también te vuelve soberbio y demasiado fuerte te convierte en prepotente. La clave está en mantener el equilibro entre la motivación y la disciplina.

Una de las lecciones que nos deja el mensaje de Cobra Kai, es tomar consciencia de lo que provocan sacar conclusiones individuales sin contar con el equipo, es un punto que aprovechan los narzisistas para aislar a sus víctimas y nutrirse. No todo el mundo presta atención a las señales que nos enseñan la películas con la excusa de “ser ficción”. Pero es importante prestar atención a los mensajes conductuales para evitar los sesgos malintencionados.

Señor, que suave y dulce es tu derecha pero,

que dura y cruel es tu izquierda. ✨🥷

#ReflexionesNinja