El ser humano tiene la fea costumbre de no valorar lo que hacen por él, pensando en hacer por quién no hace y cuando aprende a poner límites le reprochan la desatención más que agradecer lo que hayan hecho anteriormente.
El ser humano tiene la fea costumbre de no valorar lo que hacen por él, pensando en hacer por quién no hace y cuando aprende a poner límites le reprochan la desatención más que agradecer lo que hayan hecho anteriormente.
Si aprendes a reírte de ti mismo, robarás sonrisas y serás inmune a la ofensa. #ReflexionesNinja
Todas las emociones son necesarias, porque se dan paso las unas a las otras, para comprender razonamientos más o menos lógicos.