La educación y la convivencia depende de todos los seres que conviven en un mismo ecosistema, rural, urbano o natural, y el cumplimiento de las normas debe ser recíproco.
La educación y la convivencia depende de todos los seres que conviven en un mismo ecosistema, rural, urbano o natural, y el cumplimiento de las normas debe ser recíproco.
Las mejores personas pertenecen a los lugares más humildes.
Como cualquier lenguaje de comunicación, las redes es el vehículo transmisor para ser usadas para bien o para mal.
Solo una mente educada puede entender un pensamiento diferente al suyo sin necesidad de aceptarlo ni juzgarlo.
¿Porque nos empeñamos en censurar lo que nos gusta, mientras nos dejamos la vida por satisfacer a los demás, especialmente sino nos compensan?
¿Porque algunas personas se molestan con las acciones de otras, aunque no tengan mal intencionalidad, simplemente porque no comparten el mismo punto de vista por la razón que sea? Es cuestión de ser fiel a uno mismo y que sea provechoso para los demás.
La auténtica libertad es vivir en armonía con nosotros mismos, con el entorno y sin dar más importancia de la que no tienen los objetos más allá de su uso primitivo.
Toda acción conlleva una reacción. Las acciones conllevan repercusiones para bien o para mal, la cuestión está en canalizar nuestras energías para obtener la mayoría del bien individual y colectivamente, en la medida de lo posible.
La gente con heridas emocionales sin resolver se estanca en el recurso fácil de etiquetarse en facciones, porque le da mieda la diversidad natural y auténtica raza pura o natural del mestizaje, de cualquier especie.
Cuando sabemos quiénes somos, nos reímos de quien creímos que éramos. ✨🥷